miércoles, 25 de febrero de 2015

LA ORACIÓN DE LA RANA 280.

              El Presidente de los Estados Unidos William Howard Taft se hallaba una noche cenando cuando el más pequeño de sus hijos hizo un comentario irrespetuoso acerca de su padre.

             Todos quedaron paralizados por la audacia del muchacho, y el silencio se podía cortar.

             "Pero, bueno", dijo la señora Taft, "¿no vas a castigarle?"

             "Si el comentario se refería a mí en cuanto padre, naturalmente que será castigado", digo Taft. "Pero, si se refería al Presidente de los Estados Unidos, está en su derecho, porque la Constitución se lo permite."

             ¿Y por qué un padre va a quedar exento de la crítica qu es buena para un Presidente?
    

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